lunes, 14 de febrero de 2011

Cuentos Sufies.

El sufismo, es una filosofía de la vida, una fuente de conocimiento. No es una religión o un culto. Los cuentos son una forma natural de transmitir, mensajes y conocimientos y son utilizados por las culturas de todo el mundo.

Acá les dejo algunos cuentos populares
El genio, recién liberado le dijo al pescador:
- Pide tres deseos y te los daré.
- Me gustaría - dijo el pescador - que me hicieses lo bastante inteligente como para hacer una elección perfecta de los otros dos deseos.
- Hecho - dijo el genio - ¿cuáles son los otros dos?
- Gracias. No tengo más deseos

Un Maestro decía:
- Desgraciadamente, es más fácil viajar que detenerse.
Los discípulos quisieron saber por qué.
- Porque mientras viajas hacia una meta, puedes aferrarte a un sueño; pero cuando te detienes, tienes que hacer frente a la realidad
- Pero entonces, ¿cómo vamos a poder cambiar si no tenemos metas ni sueños? - preguntaron perplejos los discípulos.
- Para que un cambio sea real, tiene que darse sin pretenderlo. Haced frente a la realidad y, sin quererlo, se producirá el cambio

Una muñeca de sal recorrió miles de kilómetros de tierra firme, hasta que, por fin, llegó al mar. Quedó fascinada por aquella móvil y extraña masa, totalmente distinta de cuanto había visto hasta entonces.
- ¿Quién eres tú? - le preguntó al mar la muñeca de sal.
Con una sonrisa, el mar le respondió:
- Entra y compruébalo tú misma.

Y la muñeca se metió en el mar. Pero, a medida que se adentraba en él, iba
disolviéndose, hasta que apenas quedó nada de ella. Antes de que se
disolviera el último pedazo, la muñeca exclamó asombrada:

- ¡Ahora ya sé quién soy!.


¿Buena suerte o mala suerte?
Había una vez un hombre que vivía con su hijo en una casita del campo. Se dedicaba a trabajar la tierra y tenía un caballo para la labranza y para cargar los productos de la cosecha, era su bien más preciado. Un día el caballo se escapó saltando por encima de las bardas que hacían de cuadra. El vecino que se percató de este hecho corrió a la puerta de nuestro hombre diciéndole:
-Tu caballo se escapó, ¿qué harás ahora para trabajar el campo sin él? Se te avecina un invierno muy duro, ¡qué mala suerte has tenido!
El hombre lo miró y le dijo:
-¿Buena suerte o mala suerte? Sólo Allah lo sabe.
Pasó algún tiempo y el caballo volvió a su redil con diez caballos salvajes con los que se había unido. El vecino al observar esto, otra vez llamó al hombre y le dijo:
-No solo recuperaste tu caballo, sino que ahora tienes diez caballos más, podrás vender y criar. ¡Qué buena suerte has tenido!
El hombre lo miró y le dijo:
-¿Buena suerte o mala suerte? Sólo Allah lo sabe.
Más adelante el hijo de nuestro hombre montaba uno de los caballos salvajes para domarlo y calló al suelo partiéndose una pierna. Otra vez el vecino fue a decirle:
-¡Qué mala suerte has tenido! Tu hijo se accidentó y no podrá ayudarte, tu eres ya viejo y sin su ayuda tendrás muchos problemas para realizar todos los trabajos.
El hombre, otra vez lo miró y dijo:
-¿Buena suerte o mala suerte? Sólo Allah lo sabe.
Pasó el tiempo y en ese país estalló la guerra con el país vecino de manera que el ejército iba por los campos reclutando a los jóvenes para llevarlos al campo de batalla. Al hijo del vecino se lo llevaron por estar sano y al de nuestro hombre se le declaró no apto por estar imposibilitado. Nuevamente el vecino corrió diciendo:
-Se llevaron a mi hijo por estar sano y al tuyo lo rechazaron por su pierna rota. ¡Qué buena suerte has tenido!
Otra vez el hombre lo miró diciendo:
-¿Buena suerte o mala suerte? Sólo Allah lo sabe

Recomiendo este enlace donde podrán encontrar otros cuentos y temas importantes para descargar.

http://www.nulladiessinnemeditatione.com/cuentos_sufies.htm

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